Solo un argumento para explicar por qué retorna, ahora, este blog: no puede uno permanecer en silencio ante lo que está viendo. Así que debo compartir con vosotras, con vosotros, una serie de reflexiones en este blog
renovado en su formato, «Pensar Socialismo», que se remonta en su inicio al año
2014. Dentro de él, estas «Reflexiones desde el gallinero» (denominación basada
en la acepción 6: «En un teatro o en un cine, conjunto de localidades en la
parte más alta») pretenden, desde una cierta, alejada perspectiva, analizar el
espectáculo que se ofrece en la escena pública diaria. En nuestro caso, la
escena es de provincia; alguna vez levantará la mirada, pero su esencia es
aquella, esencia referida a una realidad, por otro lado, con frecuencia
extrapolable. No vivimos en una burbuja. He de advertir que tomo partido, como
pedía Gabriel Celaya. No me encierro en mis convicciones, las comparto y las
discuto, saldrán sin duda otras nuevas, adaptadas a las cambiantes
circunstancias y a los argumentos. Gracias de antemano por aportar y hacerlo
con una sola condición: el respeto; eso sí, en su más amplio sentido. ¡Arriba
telón!